El viernes pasado se difundió que una joven marroquí había sido agredida en la localidad de Socuéllamos, Ciudad Real, por su marido y otra mujer, que supuestamente la acusaban de no cubrirse la cabeza con un pañuelo. Como consecuencia de la paliza, poco después la joven habría sufrido un aborto.
Algunos personajes que se hacen pasar por periodistas y escritores, y muchos lectores, no tardaron en verter su bilis en los periódicos para proclamar que el Islam -religión de los implicados en el caso- es sinónimo de barbarie y sus adeptos, unos salvajes. La ocasión era propicia para sacar del baúl todos los tópicos y prejuicios racistas al uso, bajo los ropajes de una indignación selectiva. Cuanta más afectación, mayor cantidad de estupideces.
Martín Prieto en El Mundo (09/11/09): "No se merecen un juicio penal por violencia de género sino una expulsión inmediata de España. No han entendido qué significa pertenecer a la cultura española, que no admite el velo como símbolo de decencia de las mujeres." (...) "El Corán es sangriento, y en lo que respecta a la mujer es miserable por más que estas indigentes genéricas lo asuman. El Corán reduce a las féminas a esclavas asumidas". Se ve que la Biblia no es nada sangrienta, de ahí que no se emplee como explicación de las decenas de mujeres asesinadas en España por maridos cristianos.
Rosa Montero en El País (09/11/09): "Que el islam de hoy está lleno de energúmenos es una trágica realidad imposible de tapar con eufemismos políticamente correctos. El fanatismo criminal forma parte de la oscuridad del ser humano y cualquier persona, cristiana o musulmana, sintoísta o atea, puede caer en ese abismo." Pero (y el pero siempre es lo importante) "Pero sin duda hay circunstancias históricas y sociales que lo fomentan." Entre los cristianos "esos bárbaros son un porcentaje ínfimo y residual. En el mundo cristiano, la sociedad civil lleva las riendas." Semejante majadería se comenta por sí sola. "En el mundo islámico, en cambio, por complejas razones que no caben en este artículo, se está librando en estos momentos una durísima batalla entre la civilización y la barbarie." ¿Complejas razones que no caben en ese artículo, o en su ilustre cabecita? Montero se lamenta que "ahora, por desgracia, el islam [así, en general, sin más explicaciones que compliquen el discurso] está siendo abrasado por la fiebre integrista", y no duda en mezclar sudaneses y somalíes con los marroquíes de Ciudad Real. Y termina, a modo de amenaza: "Los energúmenos musulmanes, en fin, son un peligro para todos, pero especialmente, no lo olvidemos, para los propios musulmanes, que son sus primeras víctimas. Habrá que defenderse: no se puede transigir con los intransigentes." ¿Por qué no milicias de autodefensa, como en Italia? Podríamos mirar tambien al Reino Unido y aprender de ciertos defensores de Occidente. O a Alemania.
Pero antes de que Martín Prieto y Rosa Montero apoyaran la limpieza étnica y el linchamiento en sus respectivos diarios la versión inicial de lo acontecido ya había cambiado sustancialmente: "Ni recibió una “brutal” paliza, ni fue agredida por no llevar el velo islámico y ni siquiera sufrió un aborto como consecuencia de los golpes. Lo que al principio parecía un caso con tintes integristas, con el paso de las horas se ha convertido en una discusión que podría acabar calificada tan sólo como una simple falta." (El Día de Ciudad Real, 08/11/09). Si hubo agresión o no, y si fue grave o no, se podrá constatar en los tribunales, como sucede con cualquier otro crimen, sea de violencia de género o no. Pero algunos, como Miguel Molina en La Vanguardia, se resisten a que la realidad pueda estropearles la propaganda, e insisten con el espantajo comunitario.
De nuevo una supuesta crítica a la intolerancia religiosa o el machismo enmascara en realidad postulados esencialistas y trascendentalistas, típicamente coloniales, que apelan a la España eterna. Nada que ver con una crítica genuina a la religión y los trascendentalismos monoteístas. Así, cuando el Tribunal Europeo de Derechos Humanos condenó a Italia por la presencia de crucifijos en las aulas, pronto se alzaron las voces señalando con el dedo la presencia en las aulas de musulmanes que llevan hiyab. La sentencia, en cambio, hace referencia a la presencia de símbolos religiosos en las instalaciones de los colegios públicos, que no deben hacer proselitismo religioso contra la convicción de los padres de los alumnos. Es decir, lo que antes se entendía por laicismo, que sólo puede aplicarse al Estado, no a los ciudadanos. Cuando se cambió de objetivo y comenzó a exigirse que los alumnos no pudieran llevar uno u otro símbolo, religioso o cultural, so pena de exclusión, no cabe hablar de laicismo sino de discriminación. Hablando de tribunales, esta versión integrista del canon occidental está tan aceptada que hace unos días el juez Javier Gómez Bermúdez se permitió hacer algo difícilmente imaginable hace unos años: expulsar a una abogada de la sala de la Audiencia Nacional por el mero hecho de llevar puesto el hiyab.
Este es el ambiente en el que se inicia hoy en la misma Audiencia Nacional el juicio contra 11 vecinos paquistaníes e indios del Raval, Barcelona, a los que se le acusa de preparar un atentado contra el metro de Barcelona, de momento sin más pruebas que la denuncia de un testigo protegido. Ya se sabe que uno es terrorista no por lo que hace sino por lo que es. En el blog Rastros de Dixan podrá hacerse el seguimiento de este juicio y descargarse el libro que sobre este caso acaba de publicar la editorial Virus.
Comentarios
El otro día comentaba a un conocido mío mi escepticismo hacia la sentencia del TEDH, puesto que, como tú mismo recordaste, es el mismo que ratificó la expulsión de las enseñanzas francesa y turca a estudiantes con velo (http://www.javierortiz.net/voz/samuel/orden-publico). Y ya puestos a recordar, también ha rechazado el recurso a la Ley de Partidos. El caso, esta persona no es católica practicante, pero también me respondió la martingala de por qué los cristianos sí y los musulmanes no. Por cierto, ¿la sentencia contra el hiyab es vinculante para España? Ojalá que no.
Echo a faltar en el texto otro caso interesante, el de la mujer a la que obligaron a testificar sin burka en un juicio ( y también con Javier Gómez Bermúdez en el reparto, qué cosas): http://www.publico.es/espana/254550/testigo/niega/levantarse/burka/declarar/audiencia/nacional No sabía qué opinar, y apreciaría tu opinión. A fin de cuentas, no sé qué se hace en estos casos en otros países, ya sea en Europa o en los países musulmanes.
Escrito por: Gonzaga.2009/11/12 18:50:6.334000 GMT+1
En cualquier caso, en mi artículo no hablo tanto de la sentencia como de determinadas reacciones a la misma. En cuanto a lo de testificar con burka en la Audiencia Nacional, todavía aquí el juez puede esgrimir una razón técnica relativa a la identificación de la testigo, lo que a mi entender no es el caso cuando se trata del hiyab.
Escrito por: Samuel.2009/11/12 20:16:4.922000 GMT+1
www.javierortiz.net/voz/samuel
Sí, comentaba aquel caso porque no sabía en qué grado era razonable y en cuál un ejemplo más de islamofobia. En un principio, me dije que identificar al testigo era necesario, pero por no marchar en la misma tropa que Martín Prieto, Rosa Montero y Miquel Molina, mido mis palabras. Y constatar que el gobierno español podría prohibir el hiyab con el argumentario de Estrasburgo me tira para atrás -ya sólo falta saber si será el PSOE o el PP, o UPyD ya puestos.
Por cierto, no acabo de ver si cabe llamar racismo a la islamofobia. Porque, si bien la cuestión racial se cruza, el objeto de prejuicio es religioso, cultural y étnico. Quiero decir que un hombre blanco (¿ario, pongamos?) que fuese musulmán también sería discriminado. O una mujer blanca. Tal vez hace falta un término nuevo, como 'religiofobia'.
Gracias por todo. Y no olvides leer el enlace que te dejé en el post "Full Metal Jacket". A no ser que ya hayas leído el artículo de Juan Gelman.
Escrito por: Gonzaga.2009/11/12 23:36:4.552000 GMT+1
Escrito por: Samuel.2009/11/13 08:51:8.826000 GMT+1
www.javierortiz.net/voz/samuel
Dice Gonzaga:
"Por cierto, no acabo de ver si cabe llamar racismo a la islamofobia. Porque, si bien la cuestión racial se cruza, el objeto de prejuicio es religioso, cultural y étnico. Quiero decir que un hombre blanco (¿ario, pongamos?) que fuese musulmán también sería discriminado. O una mujer blanca."
Me permito replicar reivindicando el término "racismo", si bien modificando su definición. Creo, en efecto, que el racismo nada tiene que ver con la supuesta "raza", con el color de la piel ni los rasgos físicos de nadie. Suponiendo que la idea de una raza humana tuviera algún referente biológico, lo que la biología niega abiertamente. El racismo es más bien un elemento del dispositivo de poder moderno, que se articula como nos enseña Michel Foucault (en Il faut défendre la société) en torno a la dualidad poder soberano/poder biopolítico. Sabemos que bajo hegemonía del régimen biopolítico, lo que legitima al poder más que el derecho es la protección y fomento de la vida. Así, cuando el soberano se manifiesta como tal y reivindica su derecho a quitar la vida en el régimen biopolítico, debe matar, no en nombre de la ley y del principio de soberanía, sino en el de la defensa de la vida. Por ello, debe designarse una forma de vida que sea posible y necesario elmiminar en nombre de la propia vida. Las metáforas médicas (cáncer, plaga) o higiénicas (piojos, ratas) han sido y son aún utilizadas para designar el posible objeto de exterminio. Naturalmente, los significantes "terrorista" o "integrista" han venido a añadirse a la panoplia.
Creo que el punto de vista de Foucault nos permite situar el racismo en el lugar mismo desde el que ejerce sus efectos. Del mismo modo en que Spinoza consideraba que no aborrecemos algo porque sea malo, sino que lo consideramos malo porque lo aborrecemos, puede decirse que no odiamos a nadie por ser de otra raza (la raza no existe) sino que lo consideramos de otra raza porque lo odiamos. El racismo no tiene, pues nada que ver con la previa existencia de las razas y el odio "natural" a las diferencias, pero sí tiene mucho que ver con el odio inducido en el marco de un dispositivo político que es el del Estado moderno, tanto en sus formas normales como en sus modalidades de excepción (nazismo, fascismo, stalinismo etc.)
El racismo tiene así la "respetabilidad" de toda institución de Estado.
Juan Domingo
Escrito por: juandomingo.2009/11/16 15:54:1.329000 GMT+1
Escrito por: Samuel.2009/11/16 16:50:21.074000 GMT+1
www.javierortiz.net/voz/samuel
Estarnos aqui en españa no significa que tenemos que pertenecer a la cultura vuestra,vestirnos como vosotros, y practicando lo que practicais vosotros,es una forma de pensar estupida,estamos aqui para buscar nos una vida mejor.y no para cambiarnos de nuestra religion y ni para aterrorizar,
,y otra cosa el sagrado coran , es un libro muy digno , no para cualquiera puede hablar de el asi, es una joya que no tiene precio,en él se expresa su credo y se incluye su ley. y esta ley nadie ni vosotros ni cualquier otra persona la va a prohibir sea el precio como sea.
Os aconsejo de leer el libro el coran en castellano, existe y en varias idiomas, y hay ciertas cosas que a lo mejor os cambia la vida , cosas que no salen ni el la tele ni en los periodicos.
alahuma nsur al islam wal muslimin
AMIN
Escrito por: mohamed .2009/11/19 17:29:20.482000 GMT+1
Estoy de acuerdo. Mohamed, te aconsejo volver a leer lo que escribí. Hablo de racismo y critico a quienes piensan que los otros deben ser asimilados o expulsados. Salam.
Escrito por: Samuel.2009/11/20 08:55:51.620000 GMT+1
www.javierortiz.net/voz/samuel
Escrito por: shaima.2009/11/23 10:44:38.160000 GMT+1
Escrito por: shaima.2009/11/25 00:49:28.979000 GMT+1
http://nor-islam.blogspot.com/