El gráfico publicado por The New York Times (pulsar para ampliar) ayuda a visualizar el entramado financiero que vincula las crecientes deudas públicas de algunos de los países europeos hoy en la picota. Las cifras de las deudas respectivas aparecen desglosadas en función del origen nacional de los principales acreedores: inversores y entidades financieras de Alemania, Francia y el Reino Unido. Entre los datos interesantes encontramos la fuerte exposición de los inversores franceses a las deudas griega e italiana. Las cifras de deuda que muestra son en dólares y en términos absolutos, no como porcentaje del PIB (por eso las cifras griegas son más reducidas). El dibujo es incompleto: quienes aparecen como acreedores también mantienen niveles altos de deuda pública.
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Existe, pues, una fuerte interdependencia de las economías de los países de la Unión Europea. Algo lógico, desde que se creó un mercado interior europeo, se implantó una moneda común y se liberalizó la circulación de capitales. Pero sin una política fiscal común, descartada la imposición de las transacciones financieras y sin un auténtico sistema federal de ayudas, la reacción nacionalista -un "rescate" basado en préstamos bilaterales de los países de la eurozona y del Fondo Monetario Internacional- continuará la lógica neoliberal de expropiación privada de la riqueza común, pero ahora poniendo en riesgo la misma construcción institucional europea, lo que en última instancia perjudica al capital europeo. El Tratado de Lisboa ya estaba caduco antes de entrar en vigor. A pesar de todo, Immanuel Wallerstein argumenta, a propósito de la crisis del euro y de la crisis nacional belga, que de las dos, la primera "es más fácil de resolver. Básicamente, sólo requiere que Alemania se dé cuenta de que puede satisfacer mejor sus necesidades con el proteccionismo europeo y no con el proteccionismo alemán". Es decir, que favorezca una salida federal que, añado, no se someta a los famosos criterios de Maastricht. No sé si es tan fácil. No parece que los gobiernos europeos sepan o quieran renunciar a lógicas bien arraigadas, a la única técnica de gobierno que conocen, si no es para incorporar la ira popular en clave ultraconservadora.
Comentarios
¿Crees posible una marcha atras? ¿una salida del euro masiva que descalabre toda empresa europea como espacio común?. Esto me hace recordar un poco a la fallida ley de las autonomías durante la transición,- de aquellas cuatro gotas mal caidas vienen estos lodos-.
Como siempre, un placer leerte.
Escrito por: flamboyan.2010/05/05 12:42:6.943000 GMT+2