Artículo aparecido en Público el 31 de mayo de 2015.
De la cultura soviética se acostumbra a tener en Occidente una imagen muy concreta: propagandística, estereotipada, heroica, solemne. En una imagen así no cabe el sentido del humor. Pero lo cierto es que la cultura en la Unión Soviética fue mucho más diversa de lo que se acostumbra a creer e incluía, desde luego, la comedia en todos sus géneros. Ni siquiera la Segunda Guerra Mundial pudo poner fin a ella. La reciente exposición La victoria en los dibujos y caricaturas de la revista Krokodil en la galería FotoLoft de Moscú, en el centro de arte contemporáneo Winzavod, contribuye a matizar precisamente esa imagen.
La muestra, celebrada con motivo del 70 aniversario del fin de la Segunda Guerra Mundial, recoge 50 ilustraciones de la revista satírica Krokodil durante el conflicto âÂÂque en Rusia y el espacio post-soviético se conoce como Gran Guerra Patria (1941-1945)âÂÂ, dividida en cinco temas: "Mensajes del frente", "La verdad del soldado", "¡Muerte al fascista!", "Hitler, simplemente", "Krokodil en la guerra" y "Nuestra victoria", que recoge las ilustraciones del fin de la guerra hasta entrados los cincuenta, en las que comienzan a perfilarse los contornos de la guerra fría.
Además de la exposición, la galería ha publicado un excelente catálogo de 160 páginas con las ilustraciones de dibujantes y caricaturistas como Borís Efimov, Leonid Brodati, Konstantin Eliseev, Mijaíl Cheremnij, Leonid Guench y el legendario trío Krukriniksi (Mijaíl Kupriyanov, Porfiri Krilov y Nikolai Sokolov), entre otros.
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