Este disco estaba incluido en la sección de Discos de hace pocos años de la anterior página web de Javier Ortiz (2000-2005), cuya cabecera decía así: No todos los "clásicos" tienen que pasar la prueba del carbono 14. Aquí tienes unas cuantas pruebas.
Impresionante, sencillamente impresionante el trabajo realizado por Mísia en su último disco. Ritual recupera los acentos del fado tradicional -incluso en la técnica del registro sonoro: cada pieza está grabada de un tirón, sin ningún montaje posterior, y la propia fadista se sirve de un vetusto micrófono de época- para darle un nuevo impulso de desgarrada energía. Hay en este disco pre-Amália, Amália y post-Amália, situando a la mítica fadista recientemente fallecida en el centro, como evidente homenaje. El producto es tan compacto que se hace más que difícil destacar un tema sobre otro: van enlanzándose, haciéndonos transitar por los más diversos estados de ánimo, desde la melancolía a la sonrisa, en un completo tour sentimental.
La sombra persistente de Amália y el regreso a las fuentes del fado, exigente hasta el límite en su sobriedad y en su honestidad, no le impide a Mísia experimentar nuevos registros, maltratar su portentosa voz más que nunca, sin la menor concesión al fuego fatuo... y dar nuevo testimonio de su firme voluntad de conferir al canto tradicional portugués la máxima dignidad literaria.
Alguna gente me dice: «Hablas tan bien de ella porque es tu amiga». Y yo respondo siempre lo mismo: me interesé por ella por lo bien que lo hace, y fue a raíz de eso como nos hicimos amigos. El arte fue primero; la amistad, después. El primero lo admiro; de la segunda me enorgullezco.
Este disco estaba incluido en la sección de Discos de hace algunos años más de la anterior página web de Javier Ortiz (2000-2005), cuya cabecera decía así: Hay discos publicados hace pocos días que suenan infinitamente más antiguos que estos. La edad no estropea los buenos discos, al contrario, los rejuvenece.
Empezó muy jovenzuelo, a la altura del 68, haciendo una música que, sin renunciar a ser francesa, tomaba no pocas influencias del folk norteamericano de la época, y que tenía letras vitriólicas. Muchas veces me he dicho qué pasaría en España si un cantautor famoso hiciera sobre España una canción como el "Me cago en Francia" de Le Forestier. O como su "Paracaidista", en la que recomendaba a los soldados coloniales, deprimidos porque ya no tenían a quién torturar, que se metieran en la Policía. Han pasado los años, y Maxime sigue siendo estupendo, sin apearse de ninguna causa que valga la pena, aunque más irónico... y probablemente más sincero. Este CD de 1988 da cuenta de su primera evolución (luego ha seguido por la misma senda). Tiene piezas maravillosas: Nacido en cualquier lado es una canción de solidaridad con los inmigrantes, en la onda de la campaña Touche pas mon pote. La pieza "La visite" es genial: imitando el estilo de las canciones de Brassens, cuenta un viaje a la playa de Sète, donde el viejo Georges pidió que le enterraran en una de sus más célebres canciones ("Súplica para que me entierren en la playa de Sète"): allí, Maxime rinde un sentido homenaje al maestro... ligando con una turista. Las músicas son tan buenas que ni siquiera es imprescindible entender las letras.
Este disco estaba incluido en la sección de Discos de hace pocos años de la anterior página web de Javier Ortiz (2000-2005), cuya cabecera decía así: No todos los "clásicos" tienen que pasar la prueba del carbono 14. Aquí tienes unas cuantas pruebas.
El nuevo trabajo del grupo alemán Scorpions presenta un directo acústico grabado en el Convento do Beato, Lisboa, el pasado mes de febrero. Este disco cuenta con las principales baladas de la banda de Hannover, y presenta tres temas nuevos. La voz de Klaus Meine se adapta también perfectamente a las exigencias de las tres versiones que realiza sobre los temas "Drive" (originaria de The Cars), "Love Of My Life" (Queen), y "Dust In The Wind" (Kansas). Las variaciones y arreglos musicales de los temas interpretados "sin enchufes" añaden un atractivo especial al esperado disco de un grupo que está a punto de celebrar los 30 años de la aparición de su primer LP ("Lonesome Crow").
Los veteranos roqueros germanos han contado con la colaboración de Christian Kolonovits (piano), Johan Dancen (Guitarra), Mario Argandona (Percusión), Ariana Arcu (Cello), y el coro formado por Hille Bemelmanns, Liv Van Aelst y Kristel Van Craen.
Tras aceptar el consejo de grabar un acústico -no sin mucho escepticismo de por medio-, los Scorpions han logrado un extraordinario trabajo con estas versiones de sus grandes clásicos. En "Holiday", por poner un ejemplo, introducen un cambio rítmico capaz de sorprender gratamente a sus fans más fieles y exigentes.
Y ya que he citado el escepticismo, creo que la calidad de este "Acoustica" es lo suficientemente alta como para lograr el visto bueno de nuestro coordinador Couceiro. Apuesto a que se lo compra.*
* Nota de Couceiro: por un telego en el metro, nunca reconoceré que he pagado más por él.
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He aquí una excelente selección de canciones para acercarse a la obra de esta protoirlandesa de voz recia y magnífica... y de dilatada discografía. Dicen sus promotores que, cuando haya de escribirse la historia de la música popular irlandesa, esta nativa del condado de Galway tendrá que figurar obligatoriamente en lugar de honor. No les falta razón. "Aprendí a cantar casi a la vez que andar", ha comentado ella misma alguna vez. Nanci Griffith la considera "la voz de Irlanda". A los que vengan siguiendo el desarrollo de esta sección no les extrañará que destaque, dentro de las canciones de este CD, la titulada Never Be The Sun: es un dúo con Emmylou Harris.
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Ya que esta es mi primera -y espero no la última- colaboración a esta página, debo expresar que ha sido particularmente difícil elegirla.
Leyendo los comentarios anteriores, me parece obvio que lo que buscamos no son obras alabadas por la crítica o los rankings , sino obras que nos han llenado los oídos de "música".
En esta disyuntiva me quedo con la magistral obra de Michel Camilo y Tomatito llamada Spain.
Tampoco es fácil clasificarla en un estilo musical; para algunos es Jazz, o Jazz latino, para otros es música Internacional. Lo cierto es que es una obra maestra , independiente del apellido que le demos.
Pocas veces he escuchado la unión y complemento -tan escaso- de dos instrumentos tan disímiles como el piano y la guitarra, solos, y con una fuerza y sentimiento que nos hace olvidar los enchufes, la electrónica y todos los modernismos hoy en día disponibles.
La versión del clásico de Chick Corea que da nombre al álbum es magistral, la interpretación de la obra del gran maestro Luis Salinas "Troilo y Sagán" no tiene palabras. En general, un clásico de los últimos años, conviene escucharlo y atesorararlo.
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Me escribe Couceiro: "La canción de Gentileza la hizo por un mendigo (que firmaba como 'Gentileza') que escribía poemas en las paredes de Río. Un día se lo fue a enseñar a Carlinhos Brown y vio que lo habían tapado todo con pintura gris. La historia es bonita". Ella es bonita. El disco es precioso. Pero, mejor que cualquier cosa que pudiera decir yo, está el propio disco, que lo podéis escuchar íntegro a través de Internet. En esta dirección podréis encontrar también las letras, los acordes de acompañamiento de las canciones y cuanta otra información os interese sobre este disco, en particular, y sobre Marisa Monte, en general. Así que para qué decir yo nada. Venga, id para allá (pinchad en el enlace que pone "novo disco" y, dentro de eso, en el que pone "músicas". ¡Y, hala, a disfrutar!)
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La verdad es que me da cierto pudor, por los posibles lectores extranjeros, que incluya a este grupo en una página que pretende dar a conocer a gente poco conocida. Pero en fin, como supongo que la mayoría de los seguidores de Javier serán de España (perdón, digamos de El Estado Español, que luego hay gente que se me ofende), presentaré este disco y a este pedazo de grupo liderado por Dave Matthews. Es inexplicable que, siendo como es una superestrella en Estados Unidos, no nos lo hayan impuesto a los españolitos de pro, pero claro, será que lo bueno se lo quedan para ellos y aquí nos mandan lo que nos mandan.
Y qué hace estos buenos hombres. Pues es un blanco con voz de negro, otro blanco que toca un bajo hecho con madera de un barco rescatado del fondo del mar, y tres negros que tocan como dios. El sonido es una mezcla de jazz, rock, folk y lo que le echen (¿se nota por estos comentarios que me gustan las mezclas?). Este disco que os presento es, curiosamente sin la banda, es un mano a mano con Tim Reynolds tocando dos guitarras en las que no echas de menos el resto de los arreglos que habitualmente tienen las canciones que tocan... e insisto que me parecen maravillosos dichos arreglos, con lo que os podéis hacer una idea de lo que tenemos entre manos. Lo de Tim Reynolds es un caso curioso, toca la mayoría de las canciones de todos los discos que tienen, y sin embargo siempre aparece como invitado especial.
Sobre las letras, pues nada de violencia, nada de escenas tópicas del rock y sí mucha alegría, diría incluso alegría inocente. Como ejemplo de las letras destacaré una -Say Goodbye- que si no es irónica es rematadamente inocente, tiene su gracia: "Tomorrow go back to being friends / but tonight let's be lovers"
Ahora podéis conocerlos pues el último álbum Everyday (2001) está hasta en El Corte Inglés, aunque el sonido de éste es un poco más eléctrico de lo que suele ser habitual.
Polygram Records (Grecia), 1994 Editado en España por Resistencia, 2001
Este disco estaba incluido en la sección de Discos de hace algunos años más de la anterior página web de Javier Ortiz (2000-2005), cuya cabecera decía así: Hay discos publicados hace pocos días que suenan infinitamente más antiguos que estos. La edad no estropea los buenos discos, al contrario, los rejuvenece.
Elefthería Arvanitaki es problablemente la cantante griega actual más conocida en España. Lo cual tampoco quiere decir mucho, porque las radios convencionales apenas reproducen más música foránea que la anglosajona. Este disco, que ella sacó adelante en 1994 y que Resistencia acaba de editar aquí y ahora, tuvo el admirable mérito de retomar la música de Ara Dinkjian, notabilísimo compositor armenio afincado en los EEUU, y convertirla en canciones de acento griego, gracias a los arreglos de Dimitris Papadimitrou y las letras de Michalis Ganás y Lina Nikolakopoulou.
La idea de este disco es reflejo del interés de los actuales músicos griegos de más nivel por mostrar la hermandad cultural de vieja estirpe de todos los pueblos del área mediterránea, considerada en su sentido más amplio. Grecia y Armenia han estado culturalmente unidas desde tiempo inmemorial (recuérdese que la mitología griega recoge la historia de Jasón y los Argonautas, que fueron hasta el monte Ararat, en Armenia, en busca del vellocino de oro). Grecia es puente musical entre Oriente y Occidente, y este disco es una prueba más de ello.
Meritoria empresa musical de Arvanitaki que dio como resultado un disco que merece tener un espacio en toda discoteca culta.
La edición española de Resistencia incluye numerosas notas y las letras de las canciones, con traducción al castellano del muy experto José Antonio Torres Almodóvar.
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"...En cuestión de pocos meses, Dalal ha pasado de ser profesor de música y trabajar parcialmente cuidando vacas a suscitar la atención de los medios de comunicación del mundo", contaba The JerusalemPost el 16 de abril de 1999. Yair Dalal, como solista y con su grupo Al Ol, es una figura señera de la música israelí y desempeña también hoy en día un papel importante en la música del mundo. El sonido de Dalal se basa en el trabajo continuo y coherente con colegas igualmente esforzados (el conjunto A1 Ol y otros artistas locales e internacionales).
Excelente compositor e intérprete de ud y violín, Dalal nació en Israel en 1955 de padres emigrados de Irak. Su habilidad musical abarca desde la música clásica europea al jazz, el rock, el blues y la música clásica árabe. Su formación como uno de los más recientes representantes de la música judeoárabe le permite desarrollar una rara mezcla de lo tradicional y lo moderno, de lo judío y lo árabe, de lo oriental y lo occidental. Dalal se ha demostrado capaz de afrontar el reto de conciliar sus propias ideas con una amplísima gama de músicas, buscando continuamente algo nuevo que decir. Yair Dalal es también un decidido defensor de la paz en Israel y dedica su talento a eliminar las barreras ideológicas que separan a la gente y, en especial, a los judíos y a los árabes. Dalal sorprende por las numerosas grabaciones que tiene hechas en un período de tiempo muy breve: A1 Ol (1995), Samar (1997), Silan (1997), SeshBesh (1998) y Azazme (2000), en la que homenajea la música de los beduinos del desierto de Negev. Aparecen también temas suyos en numerosas recopilaciones. Su música es principalmente instrumental, con arreglos de una sencillez muy depurada. Su obsesión por la autenticidad le ha llevado incluso a grabar en las condiciones técnicas más dificultosas. El disco aquí seleccionado se grabó en directo en una carpa instalada en el monte Shacharut, de Arava, en septiembre de 2000. Dalal contó con la colaboración de dos prestigiosos percusionistas étnicos israelíes (Avi Agababa y Asaf Amir) y con la del beduino azazme Heleil Al Aweiwi, que toca la shababa (flauta) y el gurun (molinillo de café).
Este disco estaba incluido en la sección de Discos de hace pocos años de la anterior página web de Javier Ortiz (2000-2005), cuya cabecera decía así: No todos los "clásicos" tienen que pasar la prueba del carbono 14. Aquí tienes unas cuantas pruebas.
Al final, la casa griega Lyra -probablemente con el apoyo del sello español Resistencia- se ha animado a meter en el mercado español el total de la obra de la griega Savina Yannatou... y El Corte Inglés -por lo menos el de Castellana, de Madrid- a llenar una estantería con ellos. Saco aquí a relucir este Nanourismatá como podía hacerlo con el Virgin Maries of the World (1999), realizado en colaboración con Primavera en Salonico (sic), o con cualquiera de los varios más discos de la bella moza griega, todos ellos igual de exquisitos, que me he mercado. Savina se ha especializado en música del Mediterráneo de todos los tiempos, y lo mismo canta en griego que en español, en francés, en italiano o en árabe, y lo mismo se sale con una cosa del siglo XVI que con otra de las puertas del XXI. Una delicia. Recomendación: corred a comprarlos antes de que se agoten, porque lo mismo no volvemos a verlos en diez años.