Francisco Camps, presidente de la Generalitat Valenciana dice que está seguro de que todos los españoles estamos de luto. Lo dice porque 41 personas han perdido la vida en un accidente en el metro de Valencia. Es de suponer -pero tan sólo de suponer- que todos los españoles han sentido y lamentado tan fatal desventura. Naturalmente, debo poner un pero. Un pero descomunal, dicho sea de paso: ¿por qué da por hecho Camps que los españoles estaremos estos días de luto y no todo el año, teniendo en cuenta, por ejemplo, que en el pasado mes de junio 263 personas murieron en las carreteras españolas en accidentes de tráfico? ¿Fueron Juan Carlos y Sofía a alguno de los funerales de estas víctimas? No, no hubo cámaras, ni telegramas, ni abrazos reales para las familias de esas 263 víctimas mortales. Tampoco hubo luto. Son casi 9 muertes diarias, pero en formato salpicón, uno aquí, otro allá, no todos a la vez, como en Valencia, lo que se traduce en olvido y silencio por parte de los medios de comunicación, del presidente del Gobierno, del jefe de la oposición y de los monarcas. Donde hay maná informativo, cámaras y acción ahí están sus altezas y el séquito para enjugar las lágrimas de las víctimas y a aparecer junto a los súbditos. También se ha podido ver en Madrid esta mañana a Ana Botella, Trinidad Jiménez y Ruiz Gallardón luciendo prendas negras en señal de luto. Me pregunto por qué demonios no visten de la misma manera todo el año, reflejando el dolor que debe provocar el fallecimiento en las carreteras de España de 1.523 personas en lo que va de año.
Esperanza Aguirre transmite “en nombre de todos los madrileños” el pésame a los valencianos. Pero la Thatcher de bolsillo que padecemos en Madrid no transmitió ni condolencias ni pésame ni leches el pasado año, a los familiares de las casi 1.000 personas que perdieron la vida en accidentes laborales. Tampoco se ha oído hablar de luto por la muerte de los tres inmigrantes que intentaron saltar ayer la valla de Melilla. Ni pío de nuestros monarcas y políticos acerca del fallecimiento de 21 inmigrantes subsaharianos que intentaban llegar a las costas canarias huyendo de la miseria.
Así que Francisco Camps, en mi caso, está en lo cierto: estoy de luto, como en cualquier día del año, como en cualquier día de mi vida. Es una lástima que otros, sin embargo, se coloquen sólo el crespón negro por una mera cuestión de imagen y oportunidad política.
Comentarios
Escrito por: torrentina.2006/07/04 16:51:57.809000 GMT+2
Escrito por: Marat.2006/07/04 17:13:41.157000 GMT+2
Escrito por: Manu a torrentina.2006/07/05 15:55:46.984000 GMT+2