Voy a hablar de una polémica que saltó a comienzos de esta semana en la comunidad twittera en euskera.
A finales de 2020, leí gracias a este tuit de Ibon RG una entrevista a Xabier Bastida «Abaunz» en Argia.
"Ezagutzen dudan euskarazko trapa Wazemanken mailakoa da. Euskal Herrian trapa ganoraz egiten dutenak etorkinen seme-alabak dira. 18-20 urteko gazteak gauza onak egiten ari dira Bilbo inguruan. Nickzzy edo The Point, adibidez. (1)
— ibonrg (@tiutaka) November 28, 2020
Abaunz decía que no conocía música urbana (trap, reggaetón...) interesante en euskera y Kepa Matxain le preguntaba: «¿Ninguna?»
Traduzco la respuesta de Xabier Bastida: «El trap en euskera que conozco es del nivel Wazemank (un programa humorístico de hace unos años en ETB). En el País Vasco quienes hacen trap con fundamento son los hijos y las hijas de las personas migrantes. En los alrededores de Bilbao, hay jóvenes de 18-20 años haciendo cosas majas. Por ejemplo, Nickzzy o The Poing. Además, obtienen bastante mejores cifras en Youtube que los grupos en euskera que ponen en Gaztea (radio-fórmula del grupo EITB). Son bastantes “comerciales”, fáciles de pinchar en la radio, pero nadie los cita. ¿Porque cantan en castellano? ¿Será por eso? Belako canta en inglés y entran por la puerta grande. ¿Por qué pasa lo contrario con estos? Ellos nos enseñan donde vivimos. Pensamos que somos los más progres, pero tenemos mucho camino por recorrer aún».
En la cadena de tuits alguien cita a Nizuri Tazuneri. Los he escuchado poco, pero me parece que tienen una propuesta muy interesante.
Así las cosas, un colectivo que hace una semana no conocía casi nadie, Chill Mafia, echa la puerta abajo: más de 90.000 vistas en Youtube, Gabi de la Maza haciendo sus famosos vídeos-karaoke, una conocida marca deportiva de ropa que se pone en contacto con ellos, entrevistas en varios medios...
¿Cómo consiguen unos jóvenes que hacen trap, reggaetón (música urbana) llamar la atención de los medios y del stablishment?
Kiliki (uno de los miembros del citado colectivo): «Para lograr el éxito necesitamos haters».
Creo que tenían el género lo suficientemente bueno para no tener que crear polémicas, pero lo han hecho. Allá ellos. Han metido la pata en algunas cosas y seguro que la seguirán metiendo.
¿Qué caso se le hace desde el stablishment a estos jóvenes traperos? Poco o casi nada. Mirarles por encima del hombro: «el reggaetón, el trap y todo esto no es música». Les miramos como nuestros padres y madres nos miraban a nosotros cuando escuchábamos Rock Radical Vasco.
En la agenda cultural (no hablemos ya de la institucional) apenas hay contenido para menores de 25 años.
Los vídeos de los arriba citados The Poing y Nickzzy tienen 200.000, 500.000, 800.000 visitas en Youtube. Sabíamos todos que algo se estaría cociendo en las bajeras.
Machismo: que levante la mano quien esté a salvo. Si ponemos las gafas violetas al rock, muchos quedan retratados. Hace un año el programa Etxeko uzta dedicó un monográfico en euskera a la cuestión (Feminismo y reggaetón). En la parte final del programa, Ramon Zabalegi tomó algunas canciones y los otro cuatro miembros presentes en la charla (Kattalin Miner, Iñigo Etxezarreta, Axi Bukowski y una mujer que se escondía bajo un seudónimo que ahora no recuerdo -¡perdón!-) tenían que acertar cuál era del mundo del rock y cuál era puro reggaetón. Pues a veces la cosa estaba jodida.
También es triste que la chica del colectivo Chill Mafia (Irene) haya tenido que poner el candado a su perfil de Twitter. Según ellos, por los ataques recibidos. No olvidemos que Irene tiene 18-19 años.
Ha explotado esto entre nosotros y bien explotado que está. A ver si entre todas y todos somos capaces de reconducirlo y conseguir que esta polémica sera provechosa, porque tenemos Chill Mafia por un tiempo.
El 14 de febrero publicarán su mixtape (sus canciones) en todas las plataformas. Además de la versión de Xabier Lete que publicaron el domingo pasado, y que podéis escuchar abajo, anuncian una colaboración de Erramun Martikorena.
Dejo por aquí diverso material en euskera que he escuchado, visto o leído a lo largo de la semana.
Gazte autotuneatuen egunerokotasuna kantu bihurtu du Chill Mafiak. Edu Lartzanguren en Berria.
Tocaron el tema en el informativo y el magacín matinal de Euskadi Irratia, creo que el viernes: Faktoria.
Colmuna de Angel Erro en Berria: 'Nihil novum'.
Columna de Samara Velte en Berria: Ikusle arruntaren koplak.
Luistxo Fernandez en Sustatu: Broma, jaja, serio: Chill Mafia ulertzeko moduak.
Entrevista de Pello Argiñarena en Euskalerria Irratia: Chill Mafia: “Euskal kulturan jende toxiko asko dago”.
Pego aquí abajo el comentario de una profesora en Twitter.
Gure kontraesanak agerian, apunte hau euskaraz.
Nire 12-14 urteko ikasleei Xabier Lete jarriaz ez duzu ezer lortuko. EUSKAL MUSIKArekiko afizioa lortu badute Dupla, Kai Nakai, Xsakara eta Chill mafia bezelakoei esker izan da. Beraz, nire ustez, euskal kulturaren sustapenerako oso onak dira!
— Lide Fernandez (@lidefernandez) February 6, 2021