Dear JOR
Acabo de leer la última carta que te envié. Es del 20 de noviembre de 2010. Aquel día también había estado por la mañana en Oiartzun. Entonces con mi viejo; hoy también estaba la ama con nosotros.
Dos años desde que te moriste y te fuiste a Jamaica. Desgraciadamente. Miras, sin embargo, la actualidad y parece que todo sigue igual.
¿Todo? Bueno, todo-todo no. Por ejemplo, está cerca de acabarse la trayectoria sangrienta de ETA (the organization), aunque hay gente, heredera de la España de sangre y fuego, que no parece muy a gusto con esa noticia. Mientras escribo estas líneas, los jueces de la sala del 61 del Supremo están decidiendo si las elecciones autonómicas y locales que se celebrarán en Hegoalde el 22 de mayo son o no son democráticas.
Leyendo tus artículos de los 90, a veces me da que vivimos tiempos comparables al adiós de Felipe González. Por fortuna, sin el dichoso GAL de mierda. Pero la corrupción de la burbuja es igual de mierdosa, mientras 5 millones de habitantes de la España de los 45 millones están en paro. Aún recuerdo la gravedad de la situación de la Alemania unificada de los 90 cuando superaron esa cifra. Y ellos eran 80 millones.
Mientras vivimos esta grave crisis, el fútbol sigue siendo hoy también uno de los opios del pueblo, pero no soplan buenos vientos desde que el Barça y el Madrid son más poderosos de lo que ya eran. Menos mal que tu (nuestra) Real se cepilló ayer al casi invencible equipo blaugrana. Y así mató dos pájaros de un tiro: por una parte, acaricia con los dedos seguir un año más en Primera; por otra parte, permanece en manos realistas el record de 32 jornadas consecutivas sin perder en un campeonato que logró a comienzos de los 80 aquel equipo que, desgraciadamente, no ganó la Liga.
No habrías estado ayer en Anoeta, pero lo habrías visto en tu casa de Alicante. A gusto. ¡Tenías que haberme visto en el Estadio! Nos juntamos un buen número de aficionados realistas, aunque también vino mucho culé. Jamás recibió tantos pitos el equipo catalán en Donostia. La cosa merece una reflexión, pero esa la tienen que hacer los aficionados y la directiva culé.
Al menos, estamos ya en primavera. Se viven, parece, tiempos de cambio en el Norte de África y, por aquí, hay gente enganchada al Indignaos de Stéphane Hessel. Me viene a la memoria tu Diario de un resentido social al ver ese título.
A ver si somos capaces de poner en su sitio a esta cuadrilla de ladrones. Ya te contaré.
Un abrazo a esa Jamaica con cada vez más gente conocida.
Iturri
Comentarios
qué maco que ets!
Aunque lo del furbó me importa más bien nada, supongo que por aquello de ponerme sistemáticamente frente a los del poder, me alegro mucho de la victoria del Sansebastián, a pesar de mi novio culé.
Un besote
Escrito por: Marieta.2011/05/02 09:59:34.324000 GMT+2
Escrito por: Nynaeve.2011/05/04 19:52:28.147000 GMT+2
http://laruedadeltiempo.net
No hay día que no piense en tí. En buena parte debido a la generosa labor de quienes mantienen tu web como tú lo hubieras querido. No te imaginas la cantidad de veces que tus comentarios "atrasados" dan el el clavo de la actualidad. Debe de ser que la historia es circular y que repetimos una y otra vez los mismos errores.
Aún así, te imagino excitado ante el nuevo tiempo que comienza, y me faltan más que nunca tus comentarios actualizados, para compartirlos o discutirlos. ¡Vaya putada que nos hiciste muriéndote! ¡A quién se le ocurre dejarnos así de huérfanos!
Menos mal que el grupo de amigos que generosamente reuniste --a veces sin que fuéramos conscientes de que "celestineabas" para juntarnos-- goza de buena salud. De vez en cuando nos reunimos, alrededor de una buena mesa, y "arreglamos el mundo" en el espacio de una noche, pasando por alto nuestras diferencias de pensamiento.
Te hubiera gustado estar presente, y sabemos que en cierto modo lo estás. Siempre surge en nuestras conversaciones un comentario sobre lo que hubieras opinado del asunto.
Hay pueblos que creen que uno no muere del todo hasta que todos los vivos pierden su recuerdo. En ese sentido, serás inmortal, porque somos muchos los que te recordamos, todos los días. Por siempre jamás.
Un beso, Javier. Y abrazaré a Charo en tu nombre.
Fleya
Escrito por: Fleya.2011/05/05 02:35:13.440000 GMT+2