El profesor Janesk Girbecek está en España estos días. Ha tenido la deferencia de visitarme. No podía perder la ocasión de preguntar a este brillante intelectual por algunas cuestiones. Uno siempre aprende algo bajo su cobijo y en su entrañable compañía.
Profesor, hoy mismo el ex presidente Aznar ha dicho que está seguro de que si el PSOE gana las próximas elecciones, Zapatero volverá a negociar con ETA. ¿Cómo contempla usted el diálogo de un gobierno con una banda terrorista?
Ustedes tienen un dicho acerca de quitar hierro al asunto, pero de donde no hay no se puede quitar. El discurso de Aznar se cimienta sobre el odio y el resentimiento. Es iluminismo barato. Va dando tumbos y sólo escucha los agasajos de quienes aún añoran a Franco. Lo primero de todo, ¿se han obtenido acaso avances por otros medios en el acercamiento del final de ETA? Se insulta a los ciudadanos cuando se les dice que ETA no tiene capacidad para matar o que lo tiene muy difícil. Puede asesinar en 1.000 sitios y de 1.000 formas. Es una falacia burdamente coordinada por los gurús reaccionarios en busca de un puñado de votos. Bueno, algo más que un simple puñado. Déjeme que le confiese que me fascina la presunta capacidad de los españoles para pasar página de lo ocurrido entre 1936 y 1975 con un abrir y cerrar de ojos. Sin embargo, resulta chocante que pretendan solventar el llamado –de forma simplificada- conflicto vasco aislando a una parte de los ciudadanos, ilegalizando fórmulas políticas. Y todo eso tras la aberrante historia del GAL y después de haber intentado equiparar a ETA con los nacionalistas del Gobierno Vasco. Así, lo único que han logrado es que Ibarretxe y los nacionalistas en general sean contemplados como seres malignos en otras regiones de España por quienes se quedan en la superficialidad de los mensajes, repetidos de forma orquestada por los sumisos medios de comunicación. No se trata de un lunar ni de un sarpullido, sino de un órgano. Y si así fuera, lo que algunos pretenden es quitarse un lunar amputándose un brazo. ¿Dialogar? ¿Cómo, si no, se puede resolver la situación? Ahí tiene usted a Pasley en Irlanda con miembros del Sinn Fein en el mismo gobierno. Salvando las distancias, que las hay, y son muchas, no imagino una solución sin negociación, diálogo y compromisos por ambas partes. Empeñarse en la solución policial es un monumental error. Quién sabe si cometido de forma consciente. Zapatero ha cometido muchos y variados errores, pero no lo considero un personaje tan peligroso como Aznar. El nivel de los políticos españoles es indecente. Tienen –o padecen- ustedes a una banda de cuidado.
Por cierto, ¿qué le parece el papel de Aznar en la actualidad?
Aznar es un pobre hombre, pero por encima de todo es un hombre enquistado, un tipo que asimiló mal el poder y que se cayó del tiovivo cuando no se lo esperaba. Es el referente ideológico y cuasi deísta de la estirpe más conservadora en su país. También es un hombre de negocios, un tipo que ha sacado provecho de su estancia en el gobierno y que se pasea por los despachos más importantes del mundo. Es, humanamente, un tipo irresponsable, incapaz de asumir su craso error en Irak. Es un guiñol, una caricatura andante, un grano en el culo de España, si me permite la expresión, y si no se me permite, también. Aznar es un hombre al que la Historia acabará derrotando sin remisión incluso entre los suyos. En su primera legislatura tuvo algunos puntos –no muchos- que se salvan de la quema. Después, con la mayoría absoluta, zozobró, creyó estar por encima del bien y del mal. Ni hablaba catalán en la intimidad ni nada. Si su castellano es sonrojantemente insuficiente. Su última etapa fue decepcionante, pero se veía venir. Su ideario liberal es patéticamente difuso. Su talla intelectual es mínima, su discurso gramaticalmente incorrecto, pero cala entre los conservadores. Es, a mi juicio, el personaje más rancio de la democracia española. Aunque Felipe González no le anda a la zaga. No tienen ustedes suerte, la verdad.
¿Qué le achaca usted a Felipe González?
No tendría por dónde empezar. Más bien son ustedes, los españoles, quienes deberían achacarle cosas. Convirtió su país en un despacho de favores, en un cachondeo sin fronteras. No se libró ninguna parcela de la política nacional. Chiringuitos, el "enmano", el gratis total, Filesa, Ibercorp, Renfe, Cruz Roja... Fue quien más hizo por destrozar al trabajador, limando sus derechos, desvirtuando los sindicatos –más de lo que ellos mismos se desvirtuaban-, favoreció descaradamente a amigos, a la banca… Y si hablamos de empleo, de ahí vienen los empleos basura. No cumplió ninguna de sus promesas. Su política en el País Vasco no tiene por dónde cogerse. No fue valiente ni consecuente con sus desaciertos. Hipotecó el futuro de muchos españoles. Él es el responsable-origen del llamado mileurismo. Cambió la pana –como tantas veces se ha escrito- por los habanos caros y los caprichos. También es un político endiosado que cree que España le debe aún mucho. Es, junto a Aznar, y a poca distancia, un personaje nefasto para la historia de su país. Esto daría para varias tesis doctorales.
No deja usted títere con cabeza
No es para menos. Cuando quiera hablamos también de su monarca, que va por ahí arrastrando vehemencia y perdiendo las formas en foros internacionales. Estaba nervioso, muy nervioso en la cumbre iberoamericana. Lo malo es que la mayoría de los españoles cree que era porque se estaba atacando a España. Es una pena. A quien se atacaba era a Aznar y a una serie de empresas españolas, no a los españoles ni a España como país. Y aunque así hubiera sido, su actitud fue lamentable. Levantarse e irse. Eso refleja su talante. El episodio protagonizado por su rey fue lamentable. Chávez tiene derecho a decir lo que quiera de Aznar. Ya tiene Aznar sus foros y su Faes para arremeter contra el venezolano. Por no citar el episodio del golpe de 2002 y la curiosa actitud del embajador español en Venezuela. Esa imagen de Juan Carlos I en la cumbre deterioró la imagen democrática de España en medio mundo.
Hablemos de los medios de comunicación en España. ¿Cómo ve el panorama?
Con mucha pena. Lo siento por los periodistas españoles. Sobre todo por los jóvenes. Desgraciadamente, ya no sigo todo lo que sería deseable los medios españoles, pero aún saco un par de horas diarias. Veo una sociedad periodística de trincheras. Los periódicos son negocios multimedia, pequeños supermercados que venden o regalan libros, discos, toallas, sandwicheras… Las televisiones convertidas en cloacas. Hay anestesistas disfrazados de periodistas, procreadores literarios que no pueden ser de este planeta…
¿A quién se refiere con lo de procreadores...?
Hombre, no me diga que el fenómeno César Vidal es humano, porque yo escribo, oiga, y los días tienen veinticuatro horas. Ni una más ni una menos. Ayer estuve en El Corte Inglés y este señor tiene ya sección propia. Va a dejar en bragas a Lope de Vega. Y todo ello, trabajando en la radio, escribiendo en periódicos, revistas, portales de Internet, panfletos, la hoja parroquial, boletines de asociaciones de vecinos… Por eso digo que no puede ser humano.
¿Cree usted que tiene "negros"?
La pregunta correcta sería si los "negros" de sus "negros" tienen "negros".
¿No cree usted que exagera?
Repase el trabajo que hace ese señor y todas sus publicaciones y dígame eso cómo se come.
¿Echa de menos España?
Algunas de sus cosas sí, sin duda. Pero yo tengo mi vida y mi negocio de altramuces y estoy la mar de contento fuera de la Universidad, de las conferencias, de los compromisos editoriales…
¿Qué tal le va con los altramuces?
Muy bien, aunque debo confesarle que mis hijos se encargan ya de casi todo. Hemos abierto dos tiendas en Bratislava, una en Budapest y trece más en Chequia. El altramuz es muy recomendable.
¿Va a escribir un libro usted sobre los altramuces?
Pues ésa era mi intención, pero me han dicho que César Vidal tiene uno ya medio acabado sobre el asunto.
Fuera de bromas, ¿tiene usted algún libro entre manos?
Sí, pero ya le contaré. Ahora estoy centrado en saldar cuentas con la lectura. Tenía muchas asignaturas pendientes.
¿Algo español?
Uff, un montón. Pero sobre todo, autores estadounidenses.
¿Me recomienda algo?
Comer altramuces
Gracias, pero digo para leer
Cómprese el de César Vidal sobre los altramuces.
Gracias, profesor. Hasta otra.
Comentarios
genial y agudo el entrevistado. eso y más se necesita en la noticia de hoy día, la frescura, la verdad, el hablar tal y como son las cosas.
Felicidades por los altramuces!
Escrito por: dulce maría castro.2008/03/12 04:34:41.796000 GMT+1