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2004/03/08 06:00:00 GMT+1

Un baño de modestia

El ministro de Justicia, José María Michavila, se dirigió en términos insultantes y altaneros a un juez en prácticas que había osado criticar la situación de la Administración española de Justicia. Lo hizo en público, en una recepción que se celebró el pasado 29 de febrero en el Ministerio de Justicia francés. Es decir, ante muchos testigos. Ante demasiados.

Si se tratara de un incidente aislado, con llamar al orden al ministro y afear su conducta podría valer. Pero lo más preocupante del desplante de Michavila es que está en perfecta sintonía con los aires cada vez más arrogantes de sus compañeros de Gobierno y de partido, con el todavía presidente Aznar a la cabeza. Aún no me he recuperado del estupor que me provocó el otro día cuando intentó cubrir las mentiras del ministro de Defensa sobre el accidente del Yakovlev reclamando con impostada solemnidad «que dejen en paz a los muertos». ¿Intenta que creamos que los familiares de las víctimas insisten en sus quejas porque pretenden obtener rentabilidad electoral de su desgracia?

Toman a la ciudadanía por menor de edad mental. Zaplana declara: «No he mentido ni una sola vez». Y, obviamente, miente.

Desde los euros de propina a la Prensa hasta el desprecio y el insulto a los rivales -que cuando no son tontos son perversos, si es que no borrachos-, la exhibición de prepotencia que ofrece el alto mando aznarista es de mucho cuidado, dicho sea en el más literal de los sentidos.

No es, por desgracia, la primera vez que asistimos a un espectáculo de ese mal estilo. Cuando fue dueña y señora de la vida política española, la casta dirigente del felipismo realizó un despliegue similar de insufrible soberbia.

El factor común es evidente: la mayoría absoluta. Por razones que deben de hundir sus raíces en los abismos insondables del alma humana, no hay partido que goce de mayoría absoluta que no acabe envenenado por la ponzoña de la ufanía, comportándose como si su voluntad fuera la esencia misma de la ley. Y el tiempo lo empeora: tanto más dura la mayoría absoluta, tanto más crecen la jactancia por lo propio y el desdén hacia lo ajeno.

Dicen algunos: «Es que si el PP se queda en minoría tendrá que pactar». ¿Y qué hay de malo en que los representantes de 10 millones de electores -que son minoría- tengan que contemporizar con los diversos criterios de quienes no les han votado, que son más del doble? ¿Ha de perder algo la sociedad porque se vean obligados a bajarse del pedestal y admitir que su modo de afrontar las cosas no es más que uno entre los posibles?

Cruzo los dedos. Ojalá el electorado se encargue de zambullir al PP en un baño de modestia. No quiero ni imaginarme lo que pueden ser otros cuatro años de suficiencia gobernante.

Javier Ortiz. Apuntes del natural (8 de marzo de 2004) y El Mundo (10 de marzo de 2004). Hay algunos cambios, pero no son relevantes y hemos publicado aquí la versión del periódico. Subido a "Desde Jamaica" el 13 de mayo de 2017.

Escrito por: ortiz el jamaiquino.2004/03/08 06:00:00 GMT+1
Etiquetas: trillo elecciones apuntes felipismo aznarismo 2004 michavila españa zaplana aznar el_mundo | Permalink | Comentarios (0) | Referencias (0)

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