Dice El País en su artículo editorial de hoy, titulado «La opción del Príncipe»: «El matrimonio [el anuncio del matrimonio, supongo que quiere decir. JO] con una mujer moderna, universitaria y de destacado perfil profesional ha sido bienvenido para la mayoría de los españoles, según todas las encuestas. Sólo puristas del monarquismo de siglos pasados pueden echar de menos junto al heredero de la Corona a una princesa, aunque sea de opereta y cuyos únicos méritos fueran su cuna y presencia en el Gotha.»
Sin ánimo de mucha polémica -sólo la imprescindible-, señalaré que, aplicando la propia lógica del editorialista al conjunto del temario que aborda, debería decir: «Sólo monárquicos absurdos -es decir, monárquicos- pueden pretender que la Jefatura del Estado español la herede un caballero cuyos únicos méritos son su cuna y su presencia en el Gotha».
Se ve mal por qué el editorialista independiente de la mañana considera que esos méritos son «de opereta» cuando se trata de la aspirante a reina, pero no cuando se trata del aspirante a rey.
Añade el escribidor: «Cabe esperar que la modernización de la Monarquía incluya también en un futuro próximo la abolición del privilegio sucesorio que la Constitución establece a favor de los descendientes varones, aunque se trata de un artículo de la Carta Magna especialmente blindado y la oportunidad de su reforma exige un cuidadoso cálculo por parte de las fuerzas políticas.»
A lo que cabe responder, y respondo:
1.- Es vana su pretensión de que la Monarquía se modernice. Modernizar una Monarquía es como actualizar el neolítico.
2.- ¿Por qué hay que abolir el privilegio sucesorio de los descendientes sobre las descendientes y no abolir, sin más, el privilegio que tienen todos los descendientes regios, varones y hembras, sobre el resto de la ciudadanía?
3.- ¿Qué mierda de «cuidadoso cálculo» hay que hacer para modificar esas leyes chorras, sobre las que es imposible tratar sin contaminarse de antidemocratismo? ¿Qué teme el editorialista de El País? ¿Que la Jefatura del Estado español caiga en manos de un (o una) sinvergüenza? ¿Y sería eso una novedad?
Javier Ortiz. Apuntes del natural (7 de noviembre de 2003). Subido a "Desde Jamaica" el 29 de octubre de 2017.
Comentar