Algunos/as visitantes habituales de esta página web me están escribiendo expresando su interés, sus dudas y sus preocupaciones sobre la transformación de este rincón de la Red en blog (o bloc, o cuaderno, o como quiera que acabe denominándose esa modalidad). Tengo la intención de meter desde el principio, cuando arranque con el nuevo formato -en cosa de una semana, más o menos-, un apartado de lo que suele llamarse FAQ, es decir, de respuestas para las preguntas más frecuentes (o más esperables, en un primer momento). Pero voy a ir avanzando un puñado de puntos, para despejar algunas incógnitas y disipar ciertos temores que ya me están llegando.
Lo primero que quiero aclarar es por qué me he convencido de que el cambio vale la pena.
Presenta, para empezar, notables ventajas para mí.
Voy a enumerar algunos aspectos, empezando por los más ventajosos.
1ª) A partir de su conversión en blog, javierortiz.net podrá incluir cuantas secciones «invitadas» desee, consiguiendo que sean gestionadas por quienes las suscriban o se ofrezcan a administrarlas, sin que ello me dé ningún trabajo personal supletorio. Así, no sólo las actuales secciones de El portal de Belén y La tele de Marat podrán tener la cadencia que deseen sus autores, sino que podrán cobrar nuevas energías algunas secciones renqueantes (la de Música recomendada, por ejemplo) y aparecer nuevas.
2ª) Algunos trabajos complementarios de mantenimiento del sitio, como la clasificación y archivo de los Apuntes del Natural y de mis columnas y artículos en El Mundo, se efectuarán automáticamente, sin precisar de mi intervención. Apuntes, columnas, conferencias, etc., podrán ser buscados y revisados sin ninguna dificultad por quienes tengan interés en ello. La existencia de un «motor de búsqueda» ad hoc (y bien hecho) nos ayudará a todos, incluyéndome a mí: en efecto, a veces tengo que repasar lo que he escrito durante los últimos años para ver si tal o cual idea que se me ha ocurrido para un artículo no la plasmé ya de pe a pa en otra ocasión.
3ª) No tendré por qué ser «esclavo» diario de los Apuntes y podré fabricarlos más a mi conveniencia. Dado que el sistema de blog permite dar instrucciones a la máquina para que suba a la Red los artículos el día y a la hora que uno quiera, podré -por ejemplo- dejar escritos por adelantado varios artículos cuando salgo de viaje, sin verme obligado a cargar con el ordenador portátil. Me bastará con asignar a cada artículo la fecha y la hora que me parezcan convenientes y la máquina se encargará de que aparezcan en la Red el día y a la hora indicados.
4ª) Esto redundará igualmente en una considerable comodidad para quienes me leen todos los días. Ahora tienen que estar conectando vía internet con mi web para ver si ya he subido mi Apunte diario o aún no. Por el nuevo sistema, si quieren podrán suscribirse al servicio correspondiente y todos los días, en el mismo momento en el que yo termine mi Apunte, les llegará por correo electrónico.
5ª) Algunos me han dicho que les fastidia perder los viejos enlaces con los contenidos que se han ido acumulando en javierortiz.net desde el año 2000. A mí también me fastidiaría, pero eso no va a ocurrir. Todos los contenidos existentes hasta ahora seguirán en la Red tal cual, con las mismas direcciones. No se les añadirá nada de lo nuevo que vaya incorporándose al blog, pero tampoco se les quitará nada. Pongamos que uno tiene guardada la referencia al 22 Septembre de Brassens en su propio archivo, porque le hizo gracia cuando se topó en su día con la canción de marras en mis Apuntes, pero no se la bajó, para no ocupar espacio innecesario en la memoria de su ordenador, ya cargadito él. Podrá seguir tecleando http://www.javierortiz.net/apuntes/2005.09.4.htm y allí se lo encontrará. Sólo que también podrá teclear en el motor de búsqueda "brassens 22 septembre" y -salvo error u omisión, siempre posibles- también le saldrá.
6ª) Ha habido quien me ha venido a escribir: «Ah, qué bien, porque así a partir de ahora podrá haber in situ polémicas sobre tus apuntes». Pues no. A diferencia de casi todos los blogs, el mío no permitirá comentar mis escritos. Quienes administren sus propias secciones dentro del blog común podrán abrir ese grifo, si así lo desean. El mío permanecerá cerrado. Conozco lo suficiente el panorama y llevo ya los suficientes años escribiendo como para saber qué cabe esperar de esos debates, de los polemistas incontinentes y de los reventadores (por libre o a sueldo). «Esa restricción te hará perder visitantes», me ha dicho alguno. Pues qué le vamos a hacer. Quien quiera mandarme algún mensaje, de tú a tú, tendrá a su disposición un formulario muy fácil de cumplimentar. Y quienes ya conocen mis direcciones de correo electrónico podrán seguir sirviéndose de ellas, por supuesto. Pero eso será todo.
7ª) Me ofrecieron desde el principio incluir publicidad en mi blog, de ésa que administra Google. Inicialmente respondí que no. No quería que nadie se pensara que hago esto para ganar dinero. Pero desde que hablé de ese asunto, hace ya meses, hasta hoy, he comprobado que la práctica en cuestión se ha generalizado mucho y que ya no llama nada la atención la inclusión de esos mini-anuncios. Así que me he apeado de esa militancia. Iré viendo cómo funciona el asunto en la práctica.
8ª) Lo que no me parece que tengan mayor importancia son los pequeños fallos que se están produciendo por el traslado de la web del anterior servidor al nuevo. Que tengan paciencia los que quieren ver hoy tal o cual contenido y no les sale (las estadísticas de webalizer, por ejemplo). Supongo que todo el mundo ha hecho algún traslado de casa en su vida. Yo muchos. Mi teoría es que los traslados son desastres de una categoría superior a la de los terremotos de 6 puntos en la escala de Richter. Éste me está pareciendo comparativamente muy benévolo.
9ª) A algunos lectores no les apetece nada que desaparezca la presentación (la estética, por así decirlo) de esta www.javierortiz.net. Sostienen que su simplicidad artesanal -su «torpe aliño indumentario», que diría Machado- tiene un atractivo especial y, sobre todo, una personalidad que la distingue de la uniforme frialdad de los mil y un blogs que están apareciendo todos los días, con su aspecto de prospectos farmacéuticos.
Hay quien añade a eso su temor de que lo que va a venir sea de manejo más dificultoso. Esto último cabe descartarlo. El funcionamiento del blog, tal como ha sido planeado, es muy sencillo.
En lo otro acepto sin reservas que hay su tanto de verdad, pero puedo prometer y prometo que voy -que vamos- a trabajar muy en serio para que mi blog tenga pronto una estética propia, distinguible. Tendremos que pelearnos con las limitaciones del sistema (que son deliberadas: lo han hecho así para facilitar la generalización de su uso). Pero lo conseguiremos, estoy seguro. De momento estoy chocando con algunas chorradas enojosas, como la imposibilidad de introducir sangría en los párrafos, lo que fuerza a dejar una línea en blanco entre párrafo y párrafo, para que se noten los puntos y aparte, cosa que no me gusta nada. Tampoco cabe meter fondos personalizados a los textos: todo ha de ir sobre fondo blanco, en plan hospital. El fondo blanco a mí me resulta no sólo frío, sino también un tanto duro, agresivo.
Que quienes sienten esas preocupaciones sepan que yo también las tengo, y que haré lo posible para lograr cuanto antes que el sistema se adapte a mis gustos, y no mis gustos al sistema.
Pero convendréis conmigo en que las ventajas superan con mucho a los inconvenientes. Por hacer un mal juego de palabras: no hay color.
Javier Ortiz. Apuntes del natural (4 de diciembre de 2005). Subido a "Desde Jamaica" el 9 de noviembre de 2017.
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