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2005/05/17 06:00:00 GMT+2

No siempre hay caminos rectos que lleven a las cumbres (y 2)

Dicen quienes se tratan más con los máximos dirigentes del PSOE que sienten un desasosiego cierto por el grado de distanciamiento al que están llegando con los de Rajoy. No se reprochan haberse excedido en sus críticas al PP -de hecho, están convencidos de haber hecho un notable esfuerzo de comedimiento-, pero ven con preocupación la situación que se ha creado. Porque entre sus proyectos clave se cuentan varios que prevén reformas constitucionales y esas reformas no serán posibles si no las apoya el PP.

Las inquietudes del PSOE tienen no poco de vanas. Porque es cierto que les haría falta el voto del PP para cambiar la Constitución -por ejemplo, a la hora de aprobar el nuevo Estatut catalán-, pero no menos cierto es que el PP de Aznar y Acebes nunca le daría su voto en el Parlamento de Madrid para sacar adelante un Estatuto que reconociera los derechos de Cataluña como nación. Con lo que estamos ante la tópica pescadilla que se muerde la cola.

Mientras el PP sea el que es y esté cómo está, es muy de temer que los proyectos de reforma de la estructura territorial del Estado que impliquen cambios en el texto de la Constitución estén abocados al fracaso. De modo que, si Rodríguez Zapatero quiere avanzar realmente por esa vía, convendría que fuera pensando en la búsqueda de otros senderos que no impliquen la reforma de la Constitución. Senderos obligatoriamente más retorcidos, desde luego, pero eficaces en la práctica.

En el caso de Euskadi la cosa está relativamente clara. Debe apoyarse en la Disposición Adicional Primera de la Constitución, que reconoce la validez de los derechos históricos de los territorios forales (derechos que admite, por lo tanto, como previos a los sancionados por la propia Constitución).

En el caso de Cataluña -y de otras comunidades autónomas que reclamen una fuerte ampliación de sus atribuciones-, el artículo 150.2 de la Constitución atribuye al Gobierno una amplia capacidad para «transferir o delegar... facultades correspondientes a materia de titularidad estatal». En la medida en que esas facultades se transfieran y el tiempo consolide las situaciones de hecho así creadas, el retroceso a estadios anteriores se volverá prácticamente imposible.

Ya sé que la cuestión no es sólo el huevo; que también importa, y mucho, el fuero, entre otras cosas porque no tiene la misma solidez aquello que se adquiere como efecto de un derecho que lo que se obtiene como resultado de una concesión. De lo que estoy hablando es tan sólo de cómo ir avanzando, de no quedarse cruzados de brazos mientras el PP siga en sus trece. Es harto posible que los cambios producidos en las situaciones de hecho, una vez que demuestren que no representan ningún cataclismo y que conducen a un mejor funcionamiento de las instituciones y a unas relaciones más fluidas entre los pueblos, acaben por segar la hierba bajo los pies de los Acebes y compañía.

Javier Ortiz. Apuntes del natural (17 de mayo de 2005). Subido a "Desde Jamaica" el 29 de octubre de 2017.

Escrito por: ortiz el jamaiquino.2005/05/17 06:00:00 GMT+2
Etiquetas: apuntes 2005 | Permalink | Comentarios (0) | Referencias (0)

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