Parece que, al final, el problema es que no hemos invertido lo suficiente en perestroika.
Felipe González, que ha adoptado la no muy modosa costumbre de servirse de sí mismo como constante fuente de citas de autoridad, nos lo recordó anteayer: él no solo aseguró que es muy difícil predecir el pasado; también fue él quien anunció urbi et orbi que había que invertir en perestroika; no se le hizo caso, y así están las cosas.
El mundo fracasa, pero no por falta de imprudencia, que decía un tal Jacques Brel, sino porque desoye una y otra vez los consejos de la cúpula del PSOE, pese a que ella los emite con la generosidad de quien, aunque quisiera, no podría gastar todo su enorme caudal de clarividencia en sus propios asuntos. Los soviéticos desoyeron los consejos de Alfonso Guerra de un modo insultante: ni siquiera fueron a oírle, por más que el propio hermano de Don Juan había tenido la gentileza de desplazarse en persona al teatro de operaciones para facilitarles el aprendizaje.
Simultáneamente, cual si de una torpe conspiración universal se tratara, el resto del mundo se encargaba de desatender la certera recomendación de Felipe González.
Estoy seguro de que no haber invertido en perestroika ha sido, como muy bien dice González, un error histórico que el futuro se encargará de evidenciar, dando al César -o sea, a Felipe- lo que es del César, y a Dios -o sea, a él también- lo que es de Dios. Su verdadera talla de estadista mundial se verá así justamente recompensada.
A cambio, parece menos claro que haya sido un error financiero. Quienes optaron por confiar sus dineros a la causa de la perestroika, sea porque se dejaron convencer por el verbo certero de González, sea porque vieron la luz por sí mismos, tal vez estén dubitativos pensando en estos momentos en el dudoso futuro de su inversión.
Sería de su parte una mezquindad arrepentirse.
Tal vez hayan tirado por la borda unos cientos de milloncejos, pero habrán tenido a cambio la oportunidad de financiar una tesis histórica.
Javier Ortiz. El Mundo (21 de agosto de 1991). Subido a "Desde Jamaica" el 24 de agosto de 2011.
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