Ayer comentaba en La frase del día lo declarado por la ministra de Educación, Pilar del Castillo («Quienes no estudien Religión estudiarán Ética y valores democráticos») y le replicaba: «De modo que quienes estudien Religión no estudiarán Ética y valores democráticos».
Podría tomarse el comentario como sarcasmo o mera boutade. Pero no es el caso. Lo dije porque creo que esa es la pura verdad.
Vaya por delante la justa cólera que me produce el modo en que la ministra ex maoísta presenta el asunto. Porque no dice: «Cabrá optar entre Religión y Ética», colocando ambas disciplinas en plano de igualdad, sino que empieza ya por dar prioridad a la Religión sobre la Ética, situando esta última como disciplina inferior, de relevo para la otra.
Que adopte semejante actitud la ministra de un Estado que se declara aconfesional -que no laico: la Constitución elude ese término- es de mear y no echar gota.
Pero quedarme en esa crítica me parecería superficial y escasamente responsable.
El principal motivo para oponerse a que la religión católica sea asignatura en nuestras escuelas -y a estos efectos me es indiferente la importancia académica que se le otorgue- es el que di en mi comentario de ayer. En efecto, permitir que se adoctrine a los niños y niñas en la religión católica, al modo en que entiende ésta la Conferencia Episcopal Española, equivale a financiar con dinero público que en las escuelas se haga agitación contra los principios democráticos y la legalidad vigente. Que se les enseñen ideas contrarias a los valores democráticos.
Porque supongo que, si se les enseña Religión, se les tendrá que decir que es muy buena una estructura -la de la propia Iglesia- que niega la igualdad de las mujeres. Y se les tendrá que decir que es estupendo un Estado -el Vaticano- que no reconoce las libertades democráticas y no permite que sus dirigentes, empezando por el máximo, sean nombrados democráticamente. Y se les tendrá que decir que hay leyes vigentes -la del aborto, sin ir más lejos- que son abominables, criminales y homicidas. Y se les tendrá que decir que menos mal que la profe no es de Izquierda Unida y se abstiene de salir a tomar copas de noche, porque si no habría que expulsarla del colegio. Y le tendrán que decir a Juanito, estudiante de Religión, que Pepito, que se declara jansenista, como su mamá, y que por eso no va a clase de Religión (?), es un hereje de tomo y lomo, lo que le conducirá al fuego eterno, si no se arrepiente a tiempo.
Que se eduque a la infancia y la adolescencia en ese género de ideas antidemocráticas es, sencillamente, inaceptable.
No basta con reclamar que la Religión (católica) sea una asignatura opcional y sin efectos académicos. Hay que exigir, sin más, que no sea una asignatura.
y un par de breves comentarios más...
...a dos noticias del día, por cierto que relacionadas. De manera retorcida, pero relacionadas.
<¿Qué opino de que el Consejo General del Poder Judicial haya votado mayoritariamente el reingreso de Javier Gómez de Liaño en la carrera judicial? 1º) Que es una decisión política, como todas las que toma el CGPJ. Tan política como la oposición de la minoría; 2º) Que es absurdo que un juez con antecedentes penales por prevaricación pueda ejercer la función jurisdiccional; 3º) Que la decisión de reingresarlo es una consecuencia lógica del indulto que le concedió el Gobierno; 4º) Que la prerrogativa gubernamental del indulto es una antigualla jurídica, que transforma al Ejecutivo en una suprema instancia de apelación y rompe con el equilibrio de poderes que teóricamente sustenta el Estado de Derecho.
Fuera de eso, también opino que Gómez de Liaño nunca debió ser condenado por prevaricación.
< ¿Qué me parece que Canal Satélite haya absorbido Vía Digital? 1º) Que Polanco ha emprendido una fuga hacia delante. No creo que las pérdidas que estaba teniendo Sogecable -camufladas en el último ejercicio gracias a los «artificios contables», según me dicen quienes saben de estas cosas- vayan a disminuir de este modo; 2º) Que hay un montón de puestos de trabajo que quedan en el alero; 3º) Que no va a suponer ninguna disminución de la competencia, porque ambos carrier estaban actuando de manera bochornosamente concertada en la fijación de precios; 4º) Que me va a ahorrar una parabólica, un aparato y algunos dinerillos, porque yo estaba suscrito a los dos.
Javier Ortiz. Diario de un resentido social (9 de mayo de 2002). Subido a "Desde Jamaica" el 24 de abril de 2017.
Comentar