Esto va cada día mejor. Hoy ya es noticia que el sacerdote irlandés Alec Reid tuvo contactos hace meses con la dirección de ETA y se ve con Ibarretxe de vez en cuando.
Otro notición: cuando está en el País Vasco francés, Alec Reid suele alojarse en el monasterio de Belloq, en el que residen algunos curas conocidos desde tiempo poco menos que inmemorial por su talante euskaltzale. Y cuando para en el País Vasco español, en un local bilbaino que depende del obispo Blázquez.
Tómense esos mimbres requetepublicados -y algunos hasta filmados, porque Reid fue uno de los muchos personajes entrevistados en La pelota vasca, de Julio Medem- y ya se tiene un telón de fondo para repetir por enésima vez que Euskadi no es Irlanda del Norte.
La repetición podría tener algún sentido si alguien defendiera que las situaciones de Irlanda del Norte y Euskadi son iguales, o muy parecidas. Pero es que nadie lo hace. Hay gente especializada en atribuir a otros lo que jamás han dicho, a partir de lo cual les lanzan toda suerte de requisitorias y admoniciones. Nadie ha pretendido nunca que los conflictos irlandés y vasco sean homologables. Lo único que algunos hemos dicho -y decimos- es que son dos conflictos que han generado situaciones de violencia prolongada. ¿Alguien niega que sea así? ¿Sí? Pues que se explique. ¿No? Pues ya está. Eso era todo.
A partir de ahí, cada cual podrá seguir razonando o dejando de razonar como le dé la gana. Los de mi cuerda pensamos que, cuando hay conflictos como ésos, enconados y con tendencia al enquistamiento, hay que tratar de resolverlos de la manera menos traumática que quepa. Y creemos que para conseguir eso está bien que haya personas como Alec Reid, capaces de mediar y de trasladar eficaz y fielmente los mensajes que reciben de una parte para la otra. Pero lo mismo hay gente que cree que no, que el conflicto vasco puede y debe resolverse mediante la aniquilación de la izquierda abertzale.
Pues allá ella. Pero, si eso es lo que cree, que lo diga tal cual. Que proclame que, en su criterio, aquí no se necesita gente que medie, porque el Estado español va a triunfar definitivamente gracias al uso intensivo del palo y la cárcel. Y que explique por qué está tan segura de conseguir ahora lo que sus amigos del PP no lograron cuando llegaron en 1996 al Gobierno de España y prometieron resolver en cinco o seis años como máximo.
Que se deje ya de rollos sobre cómo son de diferentes Irlanda del Norte y Euskadi, por más que el reverendo Ian Pasley y Jaime Mayor Oreja parezcan primos carnales. Que no mareen más.
Todos sabemos cuál es el problema de esa gente: que en realidad no quiere que Euskadi se pacifique porque no sabría cómo encarar en el terreno estrictamente político los muchos conflictos de fondo que la violencia pervierte.
Javier Ortiz. Apuntes del natural (13 de febrero de 2005). Subido a "Desde Jamaica" el 25 de noviembre de 2017.
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