La Comisión Europea ha decidido abrir un expediente sancionador a Microsoft. Le acusa de impedir la libre competencia, al haber impuesto prácticamente en el mercado de ordenadores personales -me cuesta escribir PC: me sigue sonando a Partido Comunista- el sistema operativo Windows y negarse luego a proporcionar a las empresas de la competencia las claves que les permitan fabricar programas adaptados a ese sistema.
Si la Comisión Europea hiciera un pequeño ejercicio de traslación y aplicara a las relaciones políticas internacionales los criterios que defiende para el mercado de la informática, tendría que abrir un expediente sancionador a los Estados Unidos de América por abuso de posición dominante.
También Washington ha impuesto al mundo entero un sistema operativo. Y también se niega a compartir los secretos que permitirían hacerle la competencia.
Javier Ortiz. Diario de un resentido social (4 de agosto de 2000). Subido a "Desde Jamaica" el 6 de noviembre de 2016.
Comentar