El dedo en la llaga

Ha sido flexible en todo, inclusive en lo que dice que ha hecho en bien de los más... Sería para discutir con más tiento, pero, si las leyes "sociales" se hacen sin provisión de medios, esas leyes para nada valen o inclusive son contraproducentes... efecto perverso tal vez no procurado...
Y no me meto en lo del País Vasco: Ahí el pEsoE ha cedido hasta extremos inimaginables en la propia derecha, salvo en la extrema...

"No sólo no ha puesto ese esfuerzo al frente de sus prioridades, sino que hoy es el día que compite con la derecha en el anuncio de rebajas de impuestos."

Como dice un buen amigo, ¿qué cabe esperar de un tipo que se dice "socialista"y por no saber no sabe ni lo que es y significa en principio de progresividad que la Constitución proclama en materia tributaria?

En fin, saludos a Gil y que no se desanime.

No hace falta ser muy ducho en muestras estadísticas y encuestas, para verlo conjuntamente con la campaña electoral de los "progresistas" de Zp. Que apela más a ir a votar, que a una razón propia de porqué votar a Zp, que no sea evitar "la otra opción".

Leía hace unos días, que mientras el PIB per cápita español ya es un 95% de la media europea, el gasto público social anda por el 60%. Que presuman de superávit y den cheques bebé y óbolos caciquiles de 400€, ¿es ser social-ista? No hombre que ahora son progresistas. Porque es una medida progresiva, según Zp, ya que es un % pequeño para quien tiene altos ingresos, y una gran suma para quien tiene el sueldo mínimo interprofesional.

Adenda:
Enlazando con el tema de ayer. Según nuestro sistema electoral, elegimos para nuestra provincia las listas cerradas de diputados y senadores entre las presentadas, y son estos quienes una vez electos votan para nombrar presidente del gobierno. Sin embargo, en el colmo de esta carrera hacia el bipartidismo, en la práctica nos hacen ver que votamos en la última vuelta de unas presidenciales donde se vota A o B.

Eso es lo que la izquierda más irreflexiva percibe. La izquierda del calentón y de la intransigencia, la izquierda a la que le da igual servirle el triunfo en bandeja a los fachas cavernícolas del Partido Popular con tal de permanecer bien agusto en su torre de marfil ideológica. La izquierda, en resumen, que parece estar más en lucha con otros sectores de la izquierda que con la derecha.

Lo que percibe la izquierda reflexiva es que en esta legislatura se han hecho avances de gigante en materia de libertades y derechos individuales, que peligran si vuelve a ganar el PP.

Dentro de cuatro años esas medidas ya llevarán 5, 6 o 7 años en vigor, todo el mundo habrá podido ver que no se ha acabado el mundo y será más difícil ventilárselas de un plumazo.

Rael, dice: «Lo que percibe la izquierda reflexiva es que en esta legislatura se han hecho avances de gigante en materia de libertades y derechos individuales, que peligran si vuelve a ganar el PP.»
COM.- Muy reflexiva veo que es esa ... eso. Yo no me considero de izquierdas; no llego a tanto ni en la reflexión ni en la irreflexión. Pero lo que veo es que "en materia de libertades" estamos más o menos como estábamos con el primer Aznar y no lejos del segundo. Reconozco, sí, que hay algún avance, más simbólico que real, en algún aspecto de la llamada igualdad social, por lo menos en lo legal. Pero también que en la ley no se ha previsto suficientemente ni el acompañamiento económico ni, menos aún, el judicial, de modo que se está permitiendo a los jueces -la mayoría camarilla de la derecha extrema- que las leyes de la igualdad sean en gran medida letra mojada.
En cuanto a distribución de las rentas, el pEsoE no ha mejorado al pEpE. Y en lo relativo a las llamadas "libertades"... mejor me callo, salvo que sea promover libertades mantener la ley antipartido (cuya propuesta el Zapa inició...) o cerrar periódicos (aunque estén escritos en vasco) o anular partidos y asociaciones (aunque sean vascas) o detener a los que se oponen a "fascistillas" (perdóneseme la denominación impropia, pero creo que puede ser entendida...) como decanos y "conferenciantes" del pEpE o equivalentes que pretenden tomar al asalto las universidades públicas... Que hagan propaganda de su ideología autoritaria en las privadas, que bastantes hay...
Etc., etc.
Todo ello sin contar la doble vara de medir de las fiscalías, que denuncian revistas como El Jueves, pero no proclamas fascistas (estas sí) como las emitidas por la COPE o por periódicos como La Opinión de Zamora. (En otro mensaje pongo una de esas proclamas...)

La Opinión de Zamora, 10/02/2008
Opinión
Las mamografías de Cañete, el doctor No y otros peligros de muerte
ANTONIO CIVANTOS

Si, como dice Cañete, a las ecuatorianas les salen baratas las mamografías, para mí que las nekanes del PCTV y ANV deberían pagar el triple por el servicio. Y es que no se pueden comparar unas cosas con otras. Las mujeres ecuatorianas son bastante discretas y recogidas, monillas en general, pero más bien parcas en todas sus pertenencias.

En cambio, amigos míos, esos cetáceos del norte, con esos lomos y morcones, y esas ubres lácteas y acalostradas, deberían abonar el triple de la tarifa normal.

La verdad, no sabría uno donde encasillar a estas vascas, anatómicamente hablando. Y eso que los del Ministerio de Sanidad han establecido tres baremos corporales para catalogar a las mujeres españolas: diábolo, cilindro y campana.

Sin embargo, las vascas de la izquierda aberchale no responden a la sensibilidad de estas medidas. A no ser, claro está, que las vascas no sean españolas. Cosa que dudo mucho. Al menos, no deberían haberlas discriminado de esa guisa, pues con añadir otro parámetro a la terna tipológica española todas hubieran quedado contentas.

Por ejemplo, no se hubiera provocado ningún conflicto si las hubieran dividido en: diabólicas, cilindrínicas, campanudas y cetácicas. Las diabólicas son aquellas que te hacen la vida imposible, me refiero a esas mujeres fatales de las películas que al final siempre consiguen matarte de asco. Las cilindrínicas son las mujeres que fuman como chimeneas, ennegreciéndote la vida para siempre. Las campanudas son aquellas que están buenísimas y, además, son capaces de quitarte la Visa y todas las joyas y pieles que husmean a su paso. Y, por fin, las cetácicas, nacidas en el País Vasco y que, por su aspecto de endriago marino, se afilian a cualquier partido político patrocinado por la Eta, para salir luego en televisión y asustar a los niños.

Otro que asusta, naturalmente, es el doctor No, que es el gran sedador de Madrid. Si en su Servicio de Urgencia entraba un jubilado con dolores reumáticos, un suponer, lo trasteaba por bajo con esmero y, al rato, el afortunado salía de allí en furgón fúnebre hacia la Almudena, completamente nuevo, sedado y con la serenidad de los lamas reflejada en su rostro de muerto.

Naturalmente, a los socialistas estas actuaciones les han parecido de perlas; no en vano, ahora dicen que son partidarios de la eutanasia, que es lo más progresista que se ha inventado últimamente. Y el doctor No, claro está, se ha mostrado como un consumado experto en la materia. Por eso lo defendieron el otro día en la Asamblea de Madrid, todos los rojos puestos en pie, aplaudiéndole, vitoreándole, como si el tipo fuera una víctima de sus propios damnificados.

Desde luego, solo de verlo en fotografía, su aspecto me produce un tropel de escalofríos y, sobre todo, una posterior sudoración diabética.

Porque, a mi entender, una cosa es la eutanasia y, otra muy distinta, el descabello. Creo que entre ambos conceptos hay un sinfín de sutilezas a tener en cuenta. Porque si nos van a descabellar por un simple dolor de muelas, digo yo que sería menos hipócrita la reapertura y el acondicionamiento de las antiguas chekas, la de San Antón, por ejemplo, que la tengo aquí enfrente y, al menos, me ahorraría el taxi de ida, que siempre es una pasta.

La cheka es un sistema como otro cualquiera para que los progres practiquen la eutanasia y solucionen, burla burlando, la escasez de camas hospitalarias. Que sobran enfermos, no hay problema, se trasladan a la cheka, se llama al doctor No y, en un par de eutanasias, con revolera incluida, ha resuelto la inflación hospitalaria. Descabello, oreja y vuelta al ruedo. Como para echarse al monte.
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Puedo poner más "opiniones" de este jaez...

Pa flipar