Los dirigentes del PP han hecho un descubrimiento del que están encantados: sus incondicionales lo son a carta cabal. Están dispuestos a apencar con lo que sea con tal de que apunte contra Zapatero. ¿Que resulta contradictorio? ¿Incongruente? ¿Absurdo? ¿Impresentable? Tanto da. Sus seguidores aplauden, encantados. Hasta se diría que prefieren que sea así, porque les da como que chincha más.
Veamos un ejemplo: los dirigentes del PP llaman a los andaluces a apoyar el nuevo Estatuto de Autonomía votando sí en el referéndum, la inmensa mayoría no les hace caso y se abstiene, de lo cual deducen… que la culpa la tiene Zapatero. Lo argumentan así: ellos consideraban que no hacía ninguna falta reformar el régimen autonómico andaluz, pero decidieron intervenir en su tramitación para impedir que se aprobara un Estatuto anticonstitucional. Gracias a que se tuvieron en cuenta sus enmiendas, lograron que el texto del nuevo Estatuto finalmente acordado sea «bueno para Andalucía y bueno para España» (sic). Pero muchísimos andaluces han sentido que esa cosa de las reformas estatutarias es un error de Zapatero y le han dado la espalda. De lo que se deduce que, según el PP, la mayoría de los andaluces ha hecho bien desinteresándose de algo que es «bueno para Andalucía y bueno para España». ¿Que hay algo ahí que no acaba de encajar bien? Bah, paparruchas.
Otro ejemplo: el PP ha insistido hasta el aburrimiento en que hay que respetar escrupulosamente la independencia judicial y las resoluciones de los jueces, pese a lo cual anuncia su apoyo a la manifestación que ha convocado la AVT para el próximo sábado en Madrid en repulsa por la sentencia del Tribunal Supremo que rebaja a dos años la condena que impuso la Audiencia Nacional a De Juana Chaos. Argumento: ellos no llaman a manifestarse en contra de la sentencia del TS, sino en solidaridad con las víctimas de los atentados que perpetró De Juana. Pero la manifestación convocada por la AVT toma pie en la última sentencia del Supremo , la cual no se refiere a los asesinatos cometidos por De Juana, sino a los dos artículos que publicó en Gara. Cierto, pero eso carece de importancia. Es verdad que ellos acuden a la manifestación contra el TS y no critican a la AVT por manifestarse contra el TS, pero se equivoca quien interprete tal cosa como que ellos van a acudir a una manifestación contra el TS, poniéndose del lado de quienes no aceptan lo decidido por el alto tribunal. Y si queda raro, pues peor para Zapatero.
¿Es posible chotearse de la lógica y pretender que uno tiene razón tanto cuando sostiene una cosa como cuando defiende la contraria? Ya vemos que sí, que es posible. Pero el PP se equivoca al creer que «su público» les sigue de manera incondicional. Porque, si «su público» se queda en los incondicionales que le aplauden las gracias en los medios de comunicación adictos y en las manifestaciones ad hoc, se va a quedar con un público muy fiel, pero también limitado. Para montar el festejo y mantener el tono de permanente crispación, basta con tener detrás a tres o cuatro millones de devotos dispuestos a aplaudir extasiados las divinas palabras de los jefes. Pero para ganar las elecciones no basta esa cantidad de seguidores. Tampoco el doble. Les hace falta un respaldo tres veces mayor que ése.
Y no hay tanta gente dispuesta a pasarse por el arco del triunfo la lógica, la sensatez y, ya de paso, también el puro y simple sentido común.